Artículo publicado en el especial de San Roque 2020 editado por el Ayuntamiento de Belalcázar con motivo de la festividad de nuestro patrón.
Afrontamos este año un verano a todas luces diferente. El dichoso virus ha tocado con especial crudeza a Belalcázar, privándonos a todos de nuestra libertad, a algunos de la salud y, ahora, tozudo y persistente, sigue privándonos de la tan ansiada normalidad que, en parte, traen eventos y celebraciones como nuestras fiestas patronales, recordándonos con ello que en ningún caso debemos aún bajar la guardia.
En lo concerniente a nuestra Asociación, como a todos, el confinamiento y la paralización de ciertas actividades también nos ha afectado sobremanera, impidiendo la celebración de algunos acontecimientos que ya teníamos organizados o la realización de visitas y reuniones que hubieran dado avance a algunos de los muchos proyectos que tenemos en marcha y que deseamos desarrollar. No obstante, pese al parón, y echando la vista atrás, en el último año han sido muchas las iniciativas que hemos realizado y creemos que esta es una buena oportunidad para rememorar las más importantes, coger impulso y continuar con renovadas energías la tarea de salvaguardar el patrimonio local.
De esta forma, el pasado mes de octubre organizamos con gran éxito y acogida nuestra I Jornada Divulgativa. En ella contamos con varias conferencias impartidas por formidables profesionales –entre los que destacó la asistencia del antropólogo e investigador D. Pablo Novoa Álvarez, experto mundial en la interpretación de petroglifos y grabados prehistóricos–, así como con un espectacular taller de socialización y experiencia con halcones, realizado en colaboración con la Asociación ACEGAH y al que invitamos a participar a nuestros mayores de la residencia de ancianos y al colectivo de personas con discapacidad de la Fundación Prode.
Allá por finales del mes de noviembre promovimos también la celebración en Toledo de un homenaje en memoria de Fray Miguel de Medina, uno de los personajes universales de Belalcázar y figura relevante de nuestra historia. Para ello, diseñamos y preparamos dos azulejos conmemorativos gemelos para colocar en los lugares más representativos de su vida: la Parroquia de Santiago el Mayor de Belalcázar –pueblo que le vio nacer– y el Monasterio de San Juan de los Reyes de Toledo –lugar en el que se estableció durante gran parte de su vida y del que acabó siendo Guardián y Custodio–.
Con la colocación de estos azulejos, hermanamos para siempre ambos lugares y poblaciones a través de uno de sus más ilustres personajes, a la vez que difundimos la imagen monumental y cultural de Belalcázar fuera de nuestra provincia, siendo ahora visible para todos aquellos turistas de Toledo que visiten tan emblemático y popular monumento, referencia turística de la ciudad. Al acto, organizado por Turdulia, asistieron distinguidas autoridades eclesiásticas, civiles y académicas, así como un nutrido grupo de belalcazareños, con quienes disfrutamos de una excelente jornada de convivencia.
Por otro lado, las pasadas Navidades volvimos a colaborar activamente con el Grupo Belenista de Belalcázar en la elaboración y montaje de una de las propuestas culturales que mejor acogida ha tenido en los últimos años en nuestra localidad: el II Belén Monumental "Villa de Belalcázar".
En febrero de este año desarrollamos el proyecto medioambiental “La dehesa de encinas” junto al C.E.I.P. Sor Felipa de la Cruz y el A.M.P.A. Corpus Barga. Una actividad educativa y lúdico-cultural que contó con la asistencia de unos 45 niños y niñas del centro y que impulsamos con objeto de fomentar los hábitos de respeto y conservación del medioambiente entre los más jóvenes, acercando a nuestros hijos e hijas las labores propias del cuidado del medio natural que les rodea. Durante el transcurso de esta actividad se podaron un total de 45 árboles de la Cañada Real de la Mesta bajo la supervisión y las directrices de los agentes de medio ambiente de la Junta de Andalucía trasladados para la ocasión.
Desde la Asociación Turdulia también hemos colaborado activamente en este tiempo en el proyecto de investigación que culminó con la elaboración de la “Ruta del Zújar”, una ruta temática sobre la Guerra Civil que transcurre por Belalcázar y que identifica a lo largo de su recorrido los diferentes restos arquitectónicos y hechos históricos más relevantes que ocurrieron en el frente del Zújar. Con su señalización,
hemos conseguido que queden debidamente identificados y recuperados para la memoria estos vestigios históricos que aún perduran esparcidos por nuestro territorio, contribuyendo así a poner en valor el gran patrimonio cultural de Belalcázar y a ampliar su cada vez más extenso atractivo turístico.
Y precisamente en este cometido mantendremos nuestra lucha, habiéndonos marcado como objetivo principal a impulsar desde nuestra Asociación, la elaboración de una Carta de Riesgo Arqueológico Municipal para Belalcázar con la que documentar y recopilar todos los restos patrimoniales históricos y posibles yacimientos arqueológicos existentes en nuestra localidad; lo que les otorgará visibilidad administrativa, reconocimiento como tales y la posibilidad de protección que hasta la fecha no poseen.
Asimismo, deseamos impulsar el proyecto de la futura Colección Museográfica Municipal, que esperamos pueda convertirse en un aliciente cultural adicional de Belalcázar y del conjunto de Los Pedroches, a la par que potenciadora del desarrollo local y regional, promoviendo la cultura local como pilar indispensable sobre el que crecer como comunidad.
Y sin más, no nos queda más que seguir trabajando en lo mundano por conseguirlo y acogernos a la protección de nuestro patrón en lo divino; a quien en estos días de tributo le pedimos: “Líbranos de peste y males, Roque santo peregrino”. Cuidaos mucho y pasad un ¡feliz verano junto a los vuestros!
