Artículo publicado en el especial de San Roque 2023 editado por el Ayuntamiento de Belalcázar con motivo de la festividad de nuestro patrón.
Llega el verano y con él, de nuevo, nuestra feria: epicentro cultural y de festejos por antonomasia en el calendario local y mecanismo de reunión natural con los nuestros, que una vez más nos visitan. Como cada año por estas fechas, nos reunimos con familiares y amigos venidos de todos los lugares de la geografía para pasar unos días conectando con los nuestros –y con lo nuestro–, con tal de coger fuerzas, llenar las reservas y continuar así con el ritmo de vida que llevamos, al menos por un ciclo más.
No es esta más que una representación moderna de lo que todas las culturas y civilizaciones a lo largo de la historia han realizado: la peregrinación anual a nuestro particular santuario, a aquella porción de tierra que nos vio nacer y crecer –ya sea a nosotros o a nuestros ancestros– y que resulta importante por cuanto significa para nosotros. Aquel lugar al que retornamos cíclicamente para realizar ciertos ritos que, con mayor o menor liturgia, nos reconectan con momentos, personas o recuerdos que necesitamos seguir manteniendo vívidos en nuestro ser. En definitiva, aquel lugar que es y por siempre será nuestro hogar.
La raigambre que desarrollamos con estos lugares, incluso sin estar allí afincados, es enorme, ya que los sentimos como propios y tenemos la necesidad de estar siempre informados de cuanto ocurre en él. Son importantes porque en el fondo sabemos que allí es donde podemos encontrar nuestras raíces, conectar con el pasado, con la historia y con la realidad de lo que somos; retornar a nuestros orígenes, a lo primigenio, a allí de dónde venimos. Y es que, por definición, la raíz nos da firmeza, seguridad y el anclaje necesario con el que prosperar y no doblegarnos. Por eso, no podemos –ni debemos– perder ese vínculo, porque lo contrario sería perder nuestra base y nuestro equilibrio.
Esta, en definitiva, es la esencia del trabajo que desarrollamos desde nuestra asociación: la búsqueda, protección y divulgación de nuestras raíces como pueblo, ya que necesitamos conocer nuestro pasado, para entender nuestro presente y desarrollar nuestro futuro. Por ello, desde la Asociación Cultural Turdulia vehiculamos nuestro trabajo a través de la salvaguarda y la defensa del patrimonio cultural, natural y monumental de Belalcázar, con el objetivo de que este pueda emplearse como palanca para el desarrollo de nuestro municipio. Y, aunque en esta labor, como bien conocéis, ya llevamos años trabajando, a continuación, recogemos una muestra de las principales iniciativas y proyectos que hemos desarrollado en este último ejercicio:
impulsamos la representación de la obra de teatro “La leyenda de la Cueva de la Mora de Gafiq”, que fue estrenada el pasado verano con enorme éxito y que mantiene su pretensión de tratar de consolidarse como una nueva obra de temática histórico-popular en Belalcázar con la que dar a conocer, a través de la cultura, algunas de las leyendas y los personajes históricos más destacados de nuestra localidad que hasta la fecha no habían tenido el debido reconocimiento, como es el caso de Mohammed Al-Gafequi, a quien, en el marco de este proyecto, pretendemos homenajear con la colocación de un busto en un lugar destacado de la población, así como organizar una sucesión de eventos sobre su figura en los que ya estamos trabajando;
recuperamos la histórica y desaparecida Cruz de Palo de las Monjas de Santa Clara, siendo la quinta cruz de término de la localidad reconstruida por nuestra asociación, como parte de nuestro compromiso por recuperar elementos arquitectónicos únicos y destacados de nuestra localidad que habían desaparecido, y continuar ampliando con ello el patrimonio histórico-artístico de que disponemos, con objeto de integrarlo dentro del ya existente y formar nuevas rutas turísticas que logren explicar y transmitir correctamente el origen y significado de cada uno de ellos, a la vez que doten a Belalcázar de nuevos reclamos turístico-culturales;
hemos promovido y presentado la Carta Arqueológica de Riesgo de Belalcázar, con la que logramos catalogar e inventariar más de 260 elementos de interés patrimonial y arqueológico en la localidad, los cuales han quedado ahora debidamente reconocidos y protegidos. Se trata este de un avance de incalculable valor para establecer la correcta tutela del patrimonio arqueológico e histórico de nuestro municipio, así como de una oportunidad única para convertirlo en un recurso para el desarrollo económico y turístico de la población. Con este trabajo, Belalcázar se ha convertido en la primera localidad de Los Pedroches en poseer una Carta Arqueológica y en una de las pocas en la provincia de Córdoba que ya la tienen;
el día de San Miguel, enmarcado en los festejos que organizamos por el 750º aniversario de la parroquia de Santiago El Mayor de Belalcázar, organizamos una serie de actos culturales para reivindicar el segundo de los días de Jubileo que tiene concedidos nuestra parroquia, con lo que pretendimos acercar a los más jóvenes de la población la historia de su pueblo, dándoles a conocer algunos de los personajes más relevantes que por aquí transitaron, divulgando su obra y su legado, y haciendo que crezcan con un sentimiento de pertenencia y orgullo de su lugar de origen y sus antepasados;
por tercer año consecutivo, organizamos una actividad medioambiental con los más jóvenes de la localidad para promulgar los valores de protección de la naturaleza y la biodiversidad; la cual comportó la plantación de alrededor de 80 encinas y alcornoques de la mano de los estudiantes del I.E.S. Juan de Soto Alvarado y del grupo de voluntarios de nuestra asociación que participó en la misma, consiguiendo con ello repoblar un área yerma del Monte Malagón de Belalcázar, a la par que despertar la conciencia medioambiental de los participantes y la necesidad de cuidar nuestro entorno natural más inmediato;
asimismo, hemos firmado un acuerdo de colaboración con la Asociación Cultural Belenista de Córdoba y el Ayuntamiento de Belalcázar para organizar estas próximas navidades una ruta de belenes monumentales en la población, que estamos convencidos sorprenderá a todos. Con ella, conmemoraremos el 800º aniversario del primer belén del mundo y esperamos se convierta en todo un referente turístico y cultural en la comarca, que pueda sentar las bases de trabajo para tratar de dar continuidad a la muestra en próximos años.
Con todas estas acciones culturales e iniciativas de recuperación patrimonial pretendemos desarrollar la raigambre de la comunidad a nuestra población, potenciando el sentimiento de pertenencia y orgullo a nuestro lugar de origen y el de nuestros antepasados, aquellos que tanto trabajaron para conseguir dejarnos un legado y una sociedad mejor de la que recibieron y que son ahora fuente de inspiración para nosotros. Sin raíces la tierra muere, por lo que para afianzar nuestro futuro debemos cuidarlas y cultivarlas para que las próximas generaciones puedan continuar viviendo con prosperidad en su pueblo.
Sin más, os deseamos a todas y todos que paséis una ¡¡FELIZ FERIA Y FIESTAS DE SAN ROQUE 2023!!
